Saca, prende y sorprende. Cultura Profética en Panamá

Pegadísimos. Así se encuentran en este momento los muchachos boricuas de Cultura Profética con su tema “Saca, prende y sorprende”. Los sorprendidos en alguna medida fuimos nosotros cuando esta banda de reggae roots, la más aclamada del momento, visitó ayer Mi Diario y literalmente paró el tráfico.
Ellos están en Panamá para participar del Orgánica Roots Festival con Natiruts y Gondwana mañana, sábado 19 de septiembre, en Plaza Figali. En el parque contiguo al periódico se les hizo una sesión de fotos y se les acercaron unos niños cantando su canción y choteándolos felices; la gente los llamaba y una chica hasta bajó de un auto para tomarse fotos con ellos. ¡Serio!

Luego los rescatamos y ya en Mi Diario hablaron sin recato de todo. Confirmaron, sin tapujos, que el tema “Saca, prende y sorprende” habla de la marihuana, que ellos están a favor de legalizarla y explican por qué. Su lírica no es más que una crítica social de manera irreverente.

¿Qué transmite el tema?
“Es una celebración de que por fin se está dando una conversación inteligente y responsable de la realidad de la marihuana. Apoyando la idea de despenalizarla, porque se ha hecho mucho daño a muchas vidas. En Puerto Rico una joven fue presa por tener un cigarrillo de marihuana y en la cárcel la mataron. Hace unos días se hizo ley la despenalización por el uso recreativo allá”.

¿Abogaban por eso?
“Y por mucho más. El uso en textiles, alternativa ecológica para la gasolina, el papel, uso medicinal. Eso de que se haya escondido la verdad sobre la marihuana es en favor de la medicina comercial, las drogas legales que pueden hacer mucho más daño”.

¿Les parece un negociado?
“Total. A las farmacéuticas no les conviene. La guerra en contra de las drogas es un negocio y le hace más daño a las familias, la sangre que se derrama, el sufrimiento, el control de los narcos, todo porque una planta no la puedes sembrar en tu casa. No es proporcional”.

¿En serio creen que despenalizándolo ayudaría más?
“¡Claro! (en coro). La planta de marihuana tiene que ser libre como la planta del tomate. Es lo que pasa con el alcohol que sí es dañino, horrible y con leyes, tú no ves a un niño comprando alcohol, por eso, no le despacharías marihuana a un niño”.

Pero hay temor de la ciudadanía
“Es una gran hipocresía basada en miedos y en mentiras. Te controlan hasta el agua y te la quieren vender”.

Pero hay expertos que confirman que hace daño (hay predisposición a padecer trastornos de bipolaridad, agresividad o esquizofrenia, sobre todo en adolescentes, hasta cáncer de pulmón).
“Todo en exceso es malo. Como el azúcar, el café, el sol en exceso te quema, el agua en exceso te ahoga. Lo más importante es la educación. No es que sea bueno o malo, no es algo moral, es estudiar la perspectiva de qué es lo mejor y para nosotros es que sea libre la planta. El cáncer, el alzheimer, hay un montón de enfermedades que tienen tratamiento con el aceite de la planta”.

¿Podrían estar afectando a otros?
“Es perspectiva. Yo no siento que esté violando la ley cuando fumo marihuana. No le estoy haciendo daño a nadie, no lo veo mal en ningún sentido”.

¿Dicen que con la canción promueven a que fumen?
“Bueno, sí, hay un poco de eso en la controversia y es a propósito. La idea es seguir llamando la atención a que se siga dando esta conversación tan necesaria. Tiene un tono irreverente, civilizadamente desobediente”.

Nota: Martha Vanessa Concepción

Fotos: Álvaro Reyes